El inicio de todas las historias.

Meresdei, Crudo Invierno / Feliz Primavera 5, año 7474 según el Cómputo de la Comarca.

.

I .- Una vez más, tengo que tragarme mis propias palabras; aunque en esta ocasión el sabor es dulce, y la sensación, placentera. No estaba equivocada, sólo un poco (en realidad bastante) obstinada con salir adelante sin caer en lo que yo definía "lo mismo de siempre". Resulta que ese "lo mismo de siempre" era en verdad un "soy todo lo que no esperabas", pero camuflado, bien camaleónico.. 

 II.- (Aterrada, Morgana creyó por un instante que las nieblas no se abrirían ante ella , pero...)

III.- "¿Dónde estabas, Hombre Verde?" , preguntó la Mujer Azul , desde su sitio en los altares de Varda Elentári, puesto que a ella servía y estaba consagrada. En realidad, ella no era una mujer , y él tampoco era un hombre, pero así lo imaginaba yo acá abajo , mientras observaba el cielo que no era cielo, sólo sombras de la luz real. La Mujer Azul sabía la respuesta a su pregunta, puesto que la Dama de las Estrellas se la había concedido en los inicios del tiempo. "Yavanna, mi hermana, lo ha tomado bajo su protección, pero yo lo conocí primero, y en su alma deposité mi luz." Entonces ella pensó que quien mirase directamente a los ojos del Hombre Verde , sólo vería el poder de Elbereth en ellos. Y sonrió ante la posibilidad de hacerlo algún día. 

II.- (...ella conocía demasiado bien el camino. Dudar en aquellos segundos decisivos era una estupidez. Además, Lancelot había prometido estar allí... por fin.)

I.- Es increíble como ciertas situaciones en la vida causan estragos en el alma. Pero es aún más increíble cuando las soluciones llegan a ti sin ni siquiera ser esperadas. Yo había jurado y re-jurado que no volvería a caer . Y no caí . 


La respuesta en la niebla.

Highdei, Halimath 15, año 7474 según el Cómputo de la Comarca.

.

NO ENTIENDO NADA.

Se suponía que Morgana se encontraría con Lancelot esa brillante mañana. Y un poco más lejos, en otras tierras, Lúthien atraería a Beren a lo más profundo del bosque. Dos situaciones irremediables , dos destinos previamente escritos. Pero desde aquí , desde este rincón del mundo, la perspectiva es otra. Lancelot no apareció en el lugar acordado, y Beren pasó de largo y nunca encontró el sendero que lo llevase a Neldoreth. ¿Qué fue lo que sucedió? Ni idea. Yo aún llevo la lana roja en mi bolso, con la esperanza de atársela al gato-pez en el dedo. Algún día, cuando entienda qué rayos está pasando. 

Todo podría ser tan sencillo, pero no. Hacía tiempo que no me sentía tan feliz. Pero siempre hay que dar alguna explicación, siempre hay que hablar, siempre hay que demostrarlo todo aferrándose de las palabras , esas que van y vienen , como cenizas al viento. ¿Por qué no puedo ser feliz y ya? ¿Por qué no puedo ser yo misma, honesta, y actuar cuando mi corazón me lo dicta? Ese es el discurso que te dan , para que te sientas libre, pero por debajo insisten en exigir lo que en el momento no puedes entregar. 

Estelio han. Estelio Veleth.

Yo sé lo difícil que es. Ahora más que nunca, lo sé. Y aunque nada será como antes, quiero perderme y ver qué sucede. Aún cuando Lancelot siga buscando a Guinivere incansablemente. 

Yo no soy Guinivere. Soy Morgana. Nunca fui lo que pensaste que era.
Ahora que lo sabes, ¿dejarás que el miedo te venza, o me darás la oportunidad de encender la luz?
Con cualquiera de las dos alternativas, mi vida seguirá siendo mía. 
Y te querré por lo que eres.