26 ~ Masacre con Aguja e Hilo.

Meresdei, Thrimidge 28, año 7472 según el Cómputo de la Comarca.


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Después de disfrutar de un largo rato en la descochinadora, me puse a coser los retazos del día, a ver si conseguía un nuevo pijama o una falda colorida; pero no, soy tan mala cosiendo que sólo pude confeccionar un mantel pequeño que me enrrollé en el cuello porque no había donde más ponerlo. Era bonito, pero destartalado. Uhm, a lo mejor me sirve para forrar mi almohada, así sueño con días como éstos, días que brillan por sí solos, llenos de pequeñas aventuras. 

Retazo #1: Dos personas que amo mezclados en un sólo rostro, una que se marchó hace muchos años, y otra que quiso hacer lo mismo, pero no le resultó. Venían hacia mí, con amor en sus miradas. Una de ellas me entregó un cofre repleto de los recuerdos de una niña feliz, y yo lo enterré llorando, en una pradera desconocida, llena de flores amarillas. La otra persona me envolvió con su cuerpo cálido, me llevó a mi cama, y ambos nos envolvimos en frazadas, creando una guarida contra el frío. Su sonrisa alimentó mi alma, hasta que me obligaron a volver a la realidad.. a la oscuridad de la sala.

Retazo #2: Te extraño, Ana Frank. Espero el momento en el que podamos ser una otra vez, y enamorarnos de la vida juntas; sentir miedo, pero con la esperanza como un estandarte delante de nosotras. Y decir ¡BASTA! cuando algo no nos parezca, cuando sintamos frustración, cuando veamos desfallecer a los seres que amamos... 

Retazo #3: ¡Qué risa! Ahora soy madrina de una muñeca diabólica, hija de dos satánicos carelocos salidos del teatro pánico que se bañan con sangre, susurran secretos de cementerio y escuchan voces dentro de las paredes. Yo les dije que no quería, pero la guagua ésa me eligió.. estoy segura de que me quiere asesinar. 

Retazo #4: ¿Viste? Ahora no me sacarán a pasear nunca más. Se supone que yo debería ser siempre una sonámbula, y mirarlos a todos con los ojos soñolientos típicos míos. Pero me tomé la poción prohibida (una taza de café con chocolate caliente y tres cucharadas de azúcar + tres vasos de coca-cola) y me volví demente, y vi pajaritos, estrellas fugaces y hamburguesas voladoras; entonces, me llevaron a rastras al manicomio de los pobres noctámbulos que sienten que no es culpa de ellos que el día dure tan poco y no alcance para nada más que estudiar y volverse mono. 

Retazo #5: ¿Cuál era, según tú, nuestra máxima y ley por excelencia? Ah, sí. Sin dolor no te haces feliz. 

Retazo #6: Seamos ese pedazo de cielo.. Yo también soy Altazor, ¿ves mi paracaídas? Es más bonito cuando salto de estrella en estrella, cuando mi locura se extiende como un manto alrededor tuyo.. 

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